21 diciembre 2012

21 diciembre 2012
Obturador


El último concepto previo al manejo de la cámara en modo manual, es el de obturador.

El obturador es un dispositivo mecánico -de momento, aunque ya hay cámaras que hay suplido todas las partes móviles por un sistema electrónico- que tiene forma de cortinilla de láminas. Se sitúa delante del sensor de imagen y actúa como un telón.

Hemos dicho hasta ahora que la luz entra por el objetivo, y puede tener un caudal mayor o menor en función del valor de diafragma de la lente. Esta luz es la que llega al sensor y se plasma en él para formar la imagen pero, ¿cuanto tiempo? Esa es, precisamente, la función del obturador. Si para hablar de la apertura de diafragma usamos el símil de una manguera, para el obturador tenemos que pensar en una puerta. Esa puerta está cerrada, no permitiendo que la luz llegue al sensor. En un momento determinado -al pulsar el disparador- la puerta se abre y permanece abierta un tiempo determinado antes de cerrarse de nuevo. Ese tiempo de exposición a la luz es el que permite que se capte la imagen.

ObturadorEl tiempo que ese obturador permanece abierto, conocido como velocidad de obturación, se controla desde la cámara, y se mide en segundos o fracciones de segundo.

Puede que un segundo parezca poco tiempo pero, generalmente, en fotografía es mucho. Tanto que puede hacer que la foto nos salga movida. Por tanto, lo habitual es hablar de fracciones de segundo como 1/60, 1/100 o 1/500. Ese es el tiempo real que el obturador, esta cortinilla de la que hablamos, permanece abierta permitiendo el paso de la luz.

Como podéis deducir, un mecanismo que funciona a frecuencias tan altas, es un sistema muy delicado. Por supuesto, ¡no se toca! Si quitáis el objetivo de una cámara réflex y levantáis el espejo, apreciaréis directamente el obturador.

Y esto es todo. Con los conceptos vistos en las últimas semanas, distancia focal, apertura de diafragma y velocidad de obturación, nos meteremos de lleno en el manejo de la cámara en modo manual y veremos en qué afecta cada uno de estos parámetros, y algún otro extra.

Con esto de la Navidad, haremos un parón de dos semanas en estos pequeños y prescindibles artículos. Así que nos vemos nuevamente el día 11 de Enero -si no se acaba el mundo hoy- para zambullirnos en el manejo de la cámara.

¡Feliz Navidad y Feliz entrada, salida y lo que sea… de año!

20 diciembre 2012

20 diciembre 2012
Hoja

Hoja by Cesar Dominguez

15 diciembre 2012

15 diciembre 2012
Pulpo con fresa

Pulpo con fresa by Cesar Dominguez

14 diciembre 2012

14 diciembre 2012
Diafragma

Diafragma
Siguiendo con los conceptos previos, y a colación de lo comentado la semana pasada sobre la luminosidad de los objetivos, toca esta semana hablar sobre uno de los conceptos claves en la fotografía: el diafragma.

La semana pasada comentamos que los objetivos tenían una luminosidad máxima que era, en pocas palabras, la cantidad de luz que podía fluir por el mismo hasta el sensor. Sin embargo, en ocasiones no tiene porqué ser necesario tanto caudal y, para ello, los objetivos tienen un pequeño mecanismo llamado diafragma. Pensemos en el diafragma como en una puerta. Consta de una serie de láminas -cuantas más mejor, ya lo veremos- que hacen que ese diámetro de paso sea mayor o menor. La luminosidad nos marca el mayor diámetro que el objetivo da, pero podemos cerrar el diafragma para que sea un diámetro menor.

Nuevamente, ese cierre se expresa con la misma relación 1:X que vimos. Su variación se suele indicar en pasos -o fracciones de paso- y cada uno de esos pasos implica que esa puerta permite la entrada de la mitad de luz que el paso anterior.

Sé que es un concepto un tanto extraño, pero basta con pensar que si un diámetro determinado permite el paso de una cantidad de luz determinada, cerrar un paso el diafragma hará que entre exactamente la mitad de luz.
Los valores del mismo, desgraciadamente, no son tan sencillos, y se calculan en base a la raíz cuadrada de 2.
Rueda diafragma
Por tanto, si partimos de la relación 1:1, el siguiente paso de diafragma no será 1:2, sino 1:(raíz cuadrada de 2), es decir, 1:1,4. el siguiente será 1:((raíz cuadrada de 2)^2), lo que viene siendo 1:2. El siguiente, 1:(raíz cuadrada de 2)^3), es decir, 1:2,8. Y así sucesivamente, lo que crea la famosa escala de valores de diafragma 1,4/2/2,8/4/5,6/8/11 etc.

Estos valores se conocen como número F, y se suelen expresar como f/X, por ejemplo, f/4.
Veremos más adelante que implicaciones tiene este valor.

Indicar, por último, que aunque el diafragma es un dispositivo que se encuentra en el objetivo, se controla desde la cámara.

Perdón por el tostón, la teoría es lo que tiene...

11 diciembre 2012

11 diciembre 2012
Amanecer

Amanecer by Cesar Dominguez

08 diciembre 2012

08 diciembre 2012
The Angels' share

The Angels' share by Cesar Dominguez

Va por ti ;)

07 diciembre 2012

07 diciembre 2012
Luminosidad del Objetivo


Antes de meternos de lleno en el manejo de la cámara manual, es necesario comentar un par de conceptos previos. Lo sé, la teoría siempre es aburrida, pero necesaria.

Luminosidad del objetivo

LuminosidadLos objetivos, analizados friamente, no son más que un canal por el que pasa la luz hasta el sensor. Sin embargo, ese canal puede ser más o menos ancho, permitiendo que pase más o menos luz hasta el sensor. Tenemos que pensar en la luz como si de una corriente de agua se tratase, y el objetivo como la cañería. Cuanto más ancha sea la cañería, más caudal de luz podrá entrar al sensor por unidad de tiempo, lo que quiere decir que un objetivo más ancho permitirá que entre más luz en un segundo que un objetivo más estrecho. Pues de una manera muy rudimentaria eso es lo que significa la luminosidad de los objetivos.

Dicha luminosidad viene representada en el cuerpo del objetivo con un número que sigue el esquina 1:X, siendo X la luminosidad del objetivo concreto que tenemos en la mano.

Se han escrito ríos de tinta sobre lo que significa ese número, llegando a decirse burradas del estilo es la cantidad de luz máxima que puede haber, o cosas como objetivos más luminosos que la propia luz o que captan más luz de la que hay. Por supuesto, esa última afirmación es completamente imposible.

Realmente ese número no es más que una relación -división- entre el ancho de la lente frontal y la longitud del objetivo. Los aficionados a la astronomía conocen muy bien esa relación, usada en los telescopios. Por tanto, el primer 1 representa la relación de un objetivo que tenga el mismo ancho de lente frontal que largo de cuerpo. El segundo número, después de los dos puntos, representa la relación de ancho de lente entre longitud de nuestro objetivo.

Por supuesto, es posible que algún objetivo sea más ancho que largo, por lo que su relación será 1:0,X -por ejemplo 1:0,9- y no pasa nada (salvo que nos tendremos que dejar el sueldo de un año para comprarlo).

Cuanto más próximo a 1 -o más bajo- sea nuestra relación, más caudal de luz penetrará en el sensor en la misma cantidad de tiempo y, por tanto, más rápido podremos cerrar el diafragma -que veremos la semana que viene- para tomar la foto.

Por supuesto, esto va en función del precio del objetivo. Aunque no todo es positivo, ya que un objetivo muy luminoso -con el número muy próximo a 1- creará un efecto de difracción molesto, ya que la luz se tendrá que expandir mucho para abarcar todo el círculo del objetivo y se verán poco nítidos los bordes. Además, hay otro término que ya hemos comentado, el de profundidad de campo, que va muy relacionado con este número.

En general los objetivos luminosos -y caros- suelen rondar el 1:1,4 ó 1:1,8 o incluso 1:2 ó 1:2,8. Los más modestos tendrán una relación de 1:4,5 ó 1:5,6.

Si el objetivo es zoom, posiblemente tenga dos valores de luminosidad, uno para la distancia focal más corta y otro para la más larga, por ejemplo 1:3,5-5,6

04 diciembre 2012

04 diciembre 2012
Árboles de arena

Árboles de arena by Cesar Dominguez

02 diciembre 2012

02 diciembre 2012
Caracola

Caracola by Cesar Dominguez